El otro día entró un señor a la farmacia:
"Buenos días. Mi mujer me ha dicho que le compre agua de mar. ¿Ustedes tienen?"
"Sí, tenemos de varias marcas" Y se las enseño.
"¿Cuánto valen?"
Le digo el precio y el señor me contesta:
"¡Uy, qué caras! Déjalo que como esta tarde tengo que ir a la playa, me llevaré una garrafa y la llenaré allí."
viernes, 27 de marzo de 2009
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